
PRINCIPALES
TENDENCIAS DE LA POESÍA DE POSGUERRA:
LA
POESÍA DE POSGUERRA (DÉCADA DE LOS 40).-
Poesía arraigada.-
Muchos
poetas de posguerra hicieron una poesía técnicamente muy bien construida
y temáticamente alejada de la problemática existencial y social del
momento.
Poesía desarraigada.-
Para los
poetas desarraigados (o existencialistas), por el contrario, el mundo es un
lugar desagradable, y la poesía el medio para buscar la salvación. Esta nueva
poesía se publicará principalmente en dos revistas: Espadaña e Ínsula.
LA
POESÍA SOCIAL (DÉCADA DE LOS 50).-
En la década de los 50, la poesía española pasará
de la preocupación existencial por los problemas del individuo a una preocupación por los problemas de la
colectividad. Eso es lo que denominamos “poesía social”: denuncia,
realismo, lenguaje para “la inmensa mayoría”.
EL
GRUPO DEL 50 (DÉCADA DE LOS 60).-
En
general, en la poética de estos autores pierde peso el concepto de la poesía
como comunicación que, puesto en circulación por Vicente Aleixandre, había
sido piedra angular de la poesía del realismo social y pasa a hablarse
insistentemente, según los casos, de la
poesía como experiencia o de la poesía como conocimiento. Ello explica
que sea habitual en los versos de estos poetas la presencia de lo íntimo, el
gusto por el recuerdo, la expresión de la subjetividad; en suma, la poetización de la experiencia personal.
LOS NOVÍSIMOS (DÉCADA DE
LOS 70).- (Generación de 1968)
Algunas
de sus características son: su talante provocador en línea con los
movimientos de vanguardia, preocupación
por la forma y el lenguaje; ruptura con la cultura tradicional española
previa e inspiración en el mundo del cine, el deporte, televisión,
cómic, canciones, incorporación de referencias muy cultas a obras y
autores extranjeros (Eliot, Pond, Cavafis, etc). La rica formación literaria
contribuye al sesgo culturalista, por ello e les llama los culturalistas; y
también “los venecianos” por su gusto por ciudades como Venecia, o por
lo decadente, exquisito o estilizado, que estos poetas pretende enmarcando
sus textos en ambientes refinados.
La poesía de posguerra