GE Castro-SanMiguel. Departamento de Lengua Y Literatura Española (2º ciclo de ESO y Bachillerato)


lunes, 4 de marzo de 2013

APUNTES POESÍA POSTERIOR A 1936


Como sucede en los demás géneros literarios, también se produjo un corte profundo en la evolución de la poesía española como consecuencia de la Guerra Civil (muerte de modelos y exilio). Sin embargo, este corte fue menos drástico, ya que existen algunos nexos de unión entre la poesía anterior y posterior a la Guerra.
  




PRINCIPALES TENDENCIAS DE LA POESÍA DE POSGUERRA: 
LA POESÍA DE POSGUERRA (DÉCADA DE LOS 40).-   

Poesía arraigada.-

Muchos poetas de posguerra hicieron una poesía técnicamente muy bien construida y temáticamente alejada de la problemática existencial y social del momento.

Poesía desarraigada.-  
Para los poetas desarraigados (o existencialistas), por el contrario, el mundo es un lugar desagradable, y la poesía el medio para buscar la salvación. Esta nueva poesía se publicará principalmente en dos revistas: Espadaña e  Ínsula.

LA POESÍA SOCIAL (DÉCADA DE LOS 50).-  
En la década de los 50, la poesía española pasará de la preocupación existencial por los problemas del individuo a  una preocupación por los problemas de la colectividad. Eso es lo que denominamos “poesía social”: denuncia, realismo, lenguaje para “la inmensa mayoría”.
 

EL GRUPO DEL 50 (DÉCADA DE LOS 60).- 
En general, en la poética de estos autores pierde peso el concepto de la poesía como comunicación que, puesto en circulación por Vicente Aleixandre, había sido piedra angular de la poesía del realismo social y pasa a hablarse insistentemente, según los casos, de la poesía como experiencia o de la poesía como conocimiento. Ello explica que sea habitual en los versos de estos poetas la presencia de lo íntimo, el gusto por el recuerdo, la expresión de la subjetividad; en suma, la poetización de la experiencia personal.


LOS NOVÍSIMOS (DÉCADA DE LOS 70).- (Generación de 1968)
Algunas de sus características son: su talante provocador en línea con los movimientos de vanguardia, preocupación por la forma y el lenguaje; ruptura con la cultura tradicional española previa e inspiración en el mundo del cine, el deporte, televisión, cómic, canciones, incorporación de referencias muy cultas a obras y autores extranjeros (Eliot, Pond, Cavafis, etc). La rica formación literaria contribuye al sesgo culturalista, por ello e les llama los culturalistas; y también “los venecianos” por su gusto por ciudades como Venecia, o por lo decadente, exquisito o estilizado, que estos poetas pretende enmarcando sus textos en ambientes refinados.
 
La poesía de posguerra