El Tragaluz (obra en dos partes) se estrenó la noche del 7
de octubre de 1967 en el Teatro Bellas Artes de Madrid bajo la dirección
de José Osuna y con el decorado de Sigfrido Burman. Fue un gran éxito de público y se mantuvo en cartelera hasta el 7 de junio
de 1968. También tuvo una crítica muy
positiva. Esta era la primera obra
del teatro español de «posguerra» que trataba abiertamente el tema de la Guerra Civil española (1936-1939) desde la
perspectiva de los vencidos (los
republicanos). El estreno de la obra se produjo en circunstancias
excepcionales. Buero llevaba cinco años padeciendo una cierta
"cuarentena" por razones políticas, así que no pasó desapercibido,
pues no sólo consiguió un gran éxito de público y crítica, sino que también dio
lugar a la polémica de carácter
político
Hasta
entonces, Buero había utilizado el pasado para explorar la problemática
española contem-poránea. Con El tragaluz, su teatro se manifestaba
abiertamente político, entendiendo este concepto como indagación en la
dimensión histórica y social del hombre y no en una determinada ideología.
El tragaluz se sitúa cronológicamente al final de la segunda época del autor, aunque se
reflejen aspectos de la tercera etapa de Buero, la de los dramas filosóficos. Y
así, comprobamos el alcance que ahora cobra lo social, aunque sin merma de lo
existencial y siempre entrelazado fuertemente con el enfoque moral. Asimismo, y junto a otras
características del teatro de Buero, la obra ilustra las novedades técnicas de aquella etapa y sintetiza todos los elementos
anteriores de la obra del autor. Nacido en la época de crisis del realismo, es
un drama muy complejo, lleno de
alusiones metateatrales y meta-literarias.